Me gusta me gusta esta forma de pintar las paredes, entre el papel pintado y el DIY. Arriesgado (¡no te tuerzas!) pero con un punto retro muy cachondo que me hace pensar en mi abuela, que no tenía nada pintado así... Tiene el encanto de lo hecho a mano, imperfecto.Apto para todo tipo de superficies: úsalo sobre una base de color, sobre panelado de madera, en el suelo...
O customiza muebles, papel, telas... Es toda una deco-inversión, comprarse un rodillo de estos, oye...
Los rodillos son bien baratitos (desde 14€), y están a la venta en esta o esta tiendas de Etsy, por ejemplo.
¡Qué bonitos Ani! ¿Cuál vamos a comprar? ¿Dónde lo vamos a usar?
ResponderEliminar¿Qué hacemos si nos quedamos sin pintura a mitad de pared? Esto me crea un poco de ansiedad...
Ansiedad es la palabra. Ani, yo te lo compro y tú pintas mientras yo cierro los ojitos.
ResponderEliminarTambién creo que después de ansiedad viene obsesión y corremos el riesgo de acabar con el estampado hasta en la tapa de la taza.
ResponderEliminarYo me veo poniendo rodillos de estos en unos patines en línea y tuneando toda la casa... Cuando haces pop ya no hay stop.
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